Cómo el Covid-19 aceleró las tendencias preexistentes en el lugar de trabajo
Los viajes, la urbanización, los experimentos científicos e incluso el terrorismo significan que no será la última prueba de previsión, preparación, adaptabilidad y resistencia para gobiernos, instituciones y empresas. El Covid-19 fue un dislocador de creencias y comportamientos. Tuvo efectos catastróficos sobre el bienestar que aún hoy repercuten en muchas personas, mucho más allá del ámbito laboral. También fue un acelerador de la evolución preexistente.