10 indicadores de que necesitas desconectar del trabajo

17.02.2022

10 indicadores de que necesitas desconectar del trabajo

Todo el mundo pasa por periodos de estrés en el trabajo en los que uno se siente agobiado y la lista de tareas parece interminable. La gente ahora trabaja más horas, y el aumento del trabajo a distancia difumina las líneas que separan el trabajo y el tiempo personal, lo que deteriora nuestro equilibrio entre la vida laboral y la personal. 

Si trabajas demasiado, podrías empezar a sufrir de agotamiento, sintiéndote exhausto, estresado y desmotivado. Es fundamental que cuides de tu salud y bienestar en el trabajo: lo que puede empezar como pequeños periodos de trabajo excesivo puede convertirse en problemas físicos más graves si el estrés y el agotamiento se convierten en la norma. 

A continuación, te presentamos diez indicadores a los que deberías prestar atención y que podrían sugerirte que es hora de desconectar del trabajo, de tomarte un descanso y de encontrar formas de mejorar tu equilibrio entre tu vida y el trabajo.

Tienes dificultades para dormir

Lo ideal es que todos durmamos entre siete y ocho horas por noche. Si te cuesta conseguirlo, o si duermes regularmente siestas durante el día para contrarrestar la falta de sueño por la noche, podría ser una señal de que estás estresado. Tanto la fatiga como el insomnio son síntomas de agotamiento, y puede que te cueste conciliar el sueño porque estás pensando en el trabajo y no puedes desconectar. Si no duermes bien, te sentirás cansado e improductivo al día siguiente y podrías sentirte aún más agobiado por el trabajo.

Aunque la dificultad para dormir puede ser parte de un problema mayor, una forma de intentar mejorar tu patrón de sueño es hacer suficiente ejercicio durante el día. Hacer ejercicio al aire libre puede ayudar a conciliar el sueño por la noche y puede incorporarse fácilmente a tu día, sobre todo si trabajas desde casa. También debes procurar crear una rutina relajante a la hora de dormir, que te ayude a desconectar y a conciliar el sueño. Si sigues sin poder dormir, deberías plantearte si ha llegado el momento de hacer una pausa en el trabajo que te ayude a restablecerte 

Te cuesta concentrarte

Otra señal de que podrías necesitar un descanso en el trabajo es que te resulta difícil centrarte y concentrarte en tus tareas. Puede ser que simplemente no tengas la energía necesaria para terminar las tareas, o puede ser que te sientas tan agobiado por todo lo que tienes que hacer que te cueste empezar.

 

 

Podría ser útil tener un lugar donde anotar y organizar tus tareas, como la pizarra de cristal magnético de Leitz. Tomarse un tiempo para hacer una lista de tareas y priorizarlas puede ayudarte a centrarte en una sola cosa a la vez, en el orden en que deben completarse. Un entorno de trabajo desordenado podría significar que te distraes constantemente y no puedes concentrarte en la tarea que tienes entre manos. En ese caso, puede que necesites organizar tu escritorio con algo como el organizador de escritorio Leitz, que también incluye un cargador inalámbrico. Si después de organizar tu puesto de trabajo sigues sin poder concentrarte, puede ser un indicio de que ha llegado el momento de tomarte un descanso.

Temes ir a trabajar

Es posible que de vez en cuando sufras del "bajón del lunes", o tengas una sensación de temor al mirar hacia la semana laboral. Es posible que haya una o dos tareas de tu trabajo que no te gusten o que te resulten aburridas. Sin embargo, si te da pavor ir a trabajar constantemente y no puedes esperar a que termine la jornada laboral, puede ser parte de un problema mayor.

Si antes disfrutabas de tu trabajo pero ahora te produce una sensación de ansiedad y frustración, podría ser una señal de que estás trabajando en exceso y necesitas tomarse un descanso. Aunque no puedas disfrutar de todas las partes de tu trabajo, no deberías temer la semana laboral: tomarte un descanso puede ayudarte a encontrar de nuevo la alegría en tu trabajo.

Sientes que siempre hay demasiado que hacer

Si empiezas cada día de trabajo con la sensación de que hay demasiadas cosas por hacer y poco tiempo, probablemente estés sobrecargado de trabajo. Trabajar en exceso te hará menos productivo, ya que estarás demasiado disperso para completar las tareas de la mejor manera posible. También es probable que te sientas agobiado por lo que tienes que hacer, lo que puede hacer que te sientas más estresado, ansioso y fatigado. Esto también podría afectar a tu productividad personal, así como a tus proyectos de trabajo.

Si sientes que nunca avanzas en tu lista de tareas, puede ser una señal de que necesitas tomarte un descanso. Es posible que pienses que tomarte un descanso sólo te supondrá más trabajo cuando vuelvas; en cambio, deberías hablar con tu jefe y tu equipo sobre la redistribución del trabajo para que sea más manejable y puedas tomarte un descanso sabiendo que las cosas están controladas.

 

 

Te sientes mal físicamente

Cuando se sufre de agotamiento o estrés crónico, se notan síntomas físicos en el cuerpo. Es posible que tengas dolores de cabeza frecuentes, dolores de estómago, o que sientas náuseas. El estrés también afectará a tu sistema inmunitario, por lo que es posible que te encuentres con un resfriado del que no te puedes librar, ya que tu sistema inmunitario no es capaz de combatirlo adecuadamente.

Los síntomas físicos pueden ser un signo de una condición de salud subyacente, por lo que siempre debes hablar con un médico si estás preocupado. Pero dar un paso atrás en el trabajo y tomarse un descanso también podría ayudar a tu cuerpo a restablecerse. Ignorar los síntomas físicos podría dar lugar a problemas más graves, por lo que es mejor abordarlos desde el principio.

No tienes límites claros entre el trabajo y la vida personal

Trabajar muchas horas, consultar el correo electrónico fuera de la jornada laboral y estar siempre disponible para el trabajo son señales de que tal vez necesites mejorar el equilibrio de tu vida laboral. Puede que sientas que tienes que estar siempre disponible para ocuparte de todo el trabajo que tienes que hacer, pero necesitarás tomarte un tiempo libre para poder restablecerte y recargarte. Estar siempre pendiente de las llamadas y mensajes del trabajo también tendrá un impacto negativo en tu vida personal y familiar.

Si te tomas un descanso y estableces unos límites claros entre el trabajo y el tiempo personal, podrás trabajar de forma más productiva y será menos probable que cometas errores cuando estés menos cansado y agobiado. Puede ser más difícil establecer estos límites cuando se trabaja desde casa y las líneas separatorias son más borrosas. Asegúrate de tener horas específicas en las que apagas tus dispositivos y las notificaciones de trabajo, y asegúrate de que tu equipo sabe que no estarás disponible durante esos periodos.

Siempre estás irritable

Cuando estás sobrecargado de trabajo y estresado, puedes encontrarte mucho más irritable de lo habitual. Puede ser que pierdas la paciencia con tus compañeros o clientes, o puede estar afectando tu vida familiar, y estás perdiendo la paciencia con tus seres queridos. Puede que te des cuenta de que eres más crítico o cínico.

Este aumento de la irritabilidad podría ser el resultado de que no tienes suficiente tiempo personal para dedicarte a ti mismo, o podría ser simplemente un síntoma del estrés y la ansiedad que te provoca el trabajo. Si te das cuenta de que pierdes la paciencia más rápido de lo normal, podría ser una indicación de que necesitas dar un paso atrás en el trabajo.

Estás cayendo en hábitos poco saludables

Cuando se trabaja demasiado, se puede caer en hábitos poco saludables que sólo exacerban los síntomas del agotamiento. Puede ser que comas comida basura en lugar de comidas nutritivas, lo que hace que te sientas más cansado. O puede ser que te saltes las comidas por completo y no le des a tu cuerpo los nutrientes que necesita para funcionar. Es posible que confíes en el alcohol para ayudarte a desconectar al final del día, pero lo más probable es que al día siguiente te sientas peor y no seas capaz de concentrarte.

 

 

Aunque puedes obtener una recompensa a corto plazo de estos hábitos poco saludables, seguir una dieta sana y equilibrada, reducir el consumo de alcohol y, en general, cuidar de tu salud física te ayudará a reducir los síntomas del agotamiento. Cuando veas que los hábitos poco saludables se vuelven tentadores, echa un vistazo a tu carga de trabajo para ver qué puedes hacer para reducir la cantidad que tienes que hacer, y así disminuir el estrés que sientes.

Pierdes la pasión por tus aficiones

Sentirse demasiado estresado en el trabajo tendrá inevitablemente un efecto en tu vida personal también. Si ves que no tienes la energía o la motivación para realizar las actividades que normalmente harías, como ir al gimnasio o realizar hobbies creativos, podría ser una indicación de que necesitas tomarte un descanso del trabajo.

Cuando sufres de desgaste profesional, es probable que estés agotado y desmotivado en todos los aspectos de tu vida, no sólo en tus tareas laborales. Si te has dado cuenta de que has perdido la pasión por tus aficiones además de por tu trabajo, podría ser una señal de que necesitas mejorar el equilibrio de tu vida personal y dar un paso atrás en el trabajo.

Pasas menos tiempo con la familia y los amigos

Sentirse sobrecargado de trabajo y estresado puede llevarte a retraerte y a pasar menos tiempo con tu familia y amigos. Puede ser porque necesitas mejorar el equilibrio de tu vida familiar y establecer límites claros entre el trabajo y el tiempo personal, o puede ser que te sientas irritado y desmotivado para pasar tiempo con otras personas.

Pasar tiempo con tus seres queridos es una parte importante para cuidar tu bienestar mental y mantener una mente sana. Si tus relaciones empiezan a sufrir por el estrés que sientes en el trabajo, deberías pensar en tomarte un tiempo de descanso.

 

Leitz sabe lo importante que es lograr un buen equilibrio entre la vida laboral y la personal, para tu bienestar mental y físico. Nuestra gama de productos esenciales para trabajar desde casa puede ayudarte a mantenerte organizado y al tanto de tu carga de trabajo, para que siempre estés preparado para afrontar la jornada laboral.

Para obtener más información sobre cómo lograr un buen equilibrio entre la vida laboral y personal y evitar el agotamiento, lee nuestros siguientes artículos:

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